La Ranita Celia.

En el lago Slaiper se encontraba Celia la ranita más alegre de todas, la que siempre tenía una sonrisa para brindarle a todos.

Un día organizó la mejor fiesta de todas, aquella a la que asistirían todas las demás ranas del lago, las cuales eran sus amigas de toda la vida, junto con varias libélulas amigas de ella también.

Llegado el día y la hora de la fiesta todos comenzaron a cenar y a platicar, pasándola muy bien, sin ningún percance, todo saliendo a la perfección como siempre le salía todo a Celia.

Sin sorpresa alguna comenzó a dar un pequeño espectáculo, ya que tenía una voz increíble. La noche se fue alargando con todas y cada una de las sorpresas que Celia había preparado, para hacer de su fiesta la mejor y tener éxito esa noche la cuál nunca olvidaría.

Al finalizar la noche se escuchaban los típicos comentarios de que la fiesta había sido un éxito, se había cumplido su cometido, todas sus amigas despidiéndose con gran alegría de haber presenciado la mejor fiesta del lago.